Desconozco porque noticias así pasan desapercibidas… recientemente un grupo de neuropsicólogos italianos han descubierto que los cerebros de nuestros amigos o conocidos mantienen una sutil conexión constante con nosotros.

El equipo de científicos estaba dirigido por William Giroldini von Evanlab en Florencia y Patrizio Tressoldi del departamento general de Psicología de la universidad de Pádova.

El descubrimiento se efectuó de la siguiente manera, se cogían a dos personas que entre ellos existe amistad y se los separaba a una distancia de varios metros situándolas en habitaciones distintas preparadas para impedir cualquier tipo de contacto visual, auditivo, etc… y fué publicado por la revista f1000research.com en el siguiente artículo.

A los dos sujetos, se les colocaba un electroencefalógrafo y a uno de ellos se le indicaba que sería el “emisor”, recogiendo 128 estímulos encefalográficos por segundo, este emisor recibía señales aleatorias en el tiempo producidas por LEDs acompañadas de sonidos sinusoidal de 500 Hz.

Al receptor, le pedían que se relajase y que se preparase para recibir los estímulos de su amigo, el encefalógrafo marcaba 25 pares de diferentes ondas cerebrales y en todos los sujetos a estudio, se descubrió, que existía una sutil conexión en el rango de las ondas alfa situado entre los 9 y 10 Hz.

Al parecer, cuanto mayor es la unión entre estas personas, la “potencia” de la señal es más acusada, así como su rango, llegando a los 12 Hz.

Los asombrados científicos llegaron a una conclusión.

             «Si estudios futuros confirman estos resultados, esto, podría ser de gran importancia científica, ya que muestra una base neurofisiológica evidencia entre las relaciones humanas que implican distancia  o interacción social.»

Realmente, es un gran descubrimiento que parece reforzar la existencia de capacidades extrasensoriales rechazadas por la ciencia ortodoxa.

Pero como he dicho arriba, descubrimientos así, han pasado de puntillas… ¿Por qué? O quizás tendríamos que preguntarnos ¿Qué intereses hay en dar poco eco a estos descubrimientos?

JL