Recientemente, ha salido a la luz una serie de “falsas” antenas de teléfonos móviles que pese a parecer las convencionales antenas repetidoras, son algo muy distinto.

Resulta que un grupo de activistas británicos, han sacado a la luz una extraña actividad de radiofrecuencias que corresponden a “antenas espía”, aparentemente camufladas por antenas de teléfonos convencionales, su aspecto externo es exactamente igual, solo se diferencian por su “hardware” que se dedica a barrer y escuchar todas las conversaciones que se mantienen entre los teléfonos móviles.

Aparentemente, esas antenas son colocadas por orden gubernamental, con el fin de hacer seguimiento de presuntos delincuentes, pero “de paso” escuchan absolutamente todo, se llaman -receptores de IMSI- y emiten una característica señal detectada por este grupo.

Ya en Junio de 2015, se constató la presencia en Londres de 20 antenas espía que incluso fueron denunciadas por el grupo para la defensa de la privacidad internacional.

Las autoridades británicas fueron consultadas para confirmar o negar su uso de esta tecnología y hace meses el comisionado de la Policía Metropolitana de Londres, Bernard Hogan-Howe. Dijo en Sky News: «No vamos a hablar de ello, porque las únicas personas que se benefician están al otro lado, y no veo ninguna razón en regalar ese tipo de información.»

Desconocemos a quien se refiere con “el otro lado”, pero sospecho que no se trata de corruptos sentados detrás de enormes escritorios de ébano sobre mullidos sillones de piel de camello.

No es de extrañar que muchas fuerzas de seguridad, tengan en su iconografía el ajedrezado de sus amos.